jueves, 5 de enero de 2017

Dar el salto al minimalismo en verano: algunos consejos





Si alguna vez te has planteado dar el salto al minimalismo o barefoot, yo te aconsejo hacerlo en verano. ¿Por qué? En verano dejamos más de lado el calzado tan amortiguado y nos acercamos más al minimalismo al utilizar calzado como las chanclas o incluso andar descalzo por casa, en la piscina o playa.

Digamos que el barefoot no es un capricho en la forma de correr o algo que esté de moda y podamos hacer de un día para otro. Se trata más de un cambio importante en la forma que tenemos de andar y correr. Por eso no hay que tomárselo a la ligera y debemos ser constantes y tener paciencia a la hora de dar el salto al minimalismo.



Consejos para dar el salto al minimalismo

Uno no se pasa al barefoot o minimalismo de un día para otro. La transición al minimalismo puede durar meses. Es más, "debe" durar meses y hacerse de forma continua y progresiva para hacerla correctamente, adaptando músculos, huesos, tendones y ligamentos.

Comienza andando, no empieces corriendo. Ya hemos comentado algunas veces como pasar de correr amortiguado a hacerlo descalzo o con calzado minimalista puede hacer que nos lesionemos fácilmente, sobre todo si queremos seguir tal cual con nuestros ritmos de entrenamientos. Al principio, el minimalismo es un complemento al entrenamiento, no un sustituto.

El ejercicio más parecido a correr pero con menos impacto es andar. Comienza andando descalzo o con calzado minimalista durante 10-15 minutos al día. Haz también ejercicios de fortalecimiento de dedos como puede ser subir escaleras.

A partir de ahí, podemos ir subiendo 2-5 minutos más al día cada semana y a partir del primer mes, ir metiendo 2-3 minutos de carrera suave. Para seguir progresando 2-5 minutos más de carrera al día cada semana.

Trabajar la fuerza de los gemelos y la elasticidad de éstos y del tendón de Aquiles nos puede salvar de alguna lesión y puede acelerar el proceso de adaptación. Ten en cuenta que el exceso de amortiguación en las zapatillas tradicionales ha hecho que el gemelo pierda fuerza y se acorte, perdiendo elasticidad, algo que iremos notando en la fase de transición.


Las sensaciones que tengamos van a ser muy importantes. En el momento en el que notemos cualquier molestia debemos parar y descansar, al menos un par de días. Y, aunque notes que podrías hacer más en un entrenamiento, no te confíes y sigue la progresión sin saltarte etapas.
banner
Previous Post
Next Post

0 comentarios: